Red por la Equidad Democrática en Honduras socializa informe de observación de elecciones 2021

La Red por la Equidad Democrática en Honduras (REDH) puso a la disposición de la ciudadanía, autoridades de los órganos electorales, Congreso Nacional, sociedad civil, partidos políticos, comunidad internacional y medios de comunicación, el informe preliminar titulado “De la Observación de las Elecciones Generales noviembre 2021”.

El informe incluye un monitoreo del funcionamiento de los órganos electorales con énfasis en el Consejo Nacional Electoral (CNE), la eficiencia del gasto público en las elecciones generales, la violencia política, el clientelismo electoral, la compra de votos, el financiamiento político de las campañas electorales y los perfiles de los candidatos.

Algunas conclusiones obtenidas del informe es que los altos niveles de corrupción han causado que la población hondureña no crea en la democracia, por lo que ni el proceso ni las instancias electorales gozan de satisfacción de las mayorías. Asimismo, la “partidización” de los órganos electorales ocasiona retrasos en el cumplimiento de los plazos, lentitud en la toma de decisiones, dudas sobre la transparencia y burocratización indebida.

Algunas recomendaciones que se exponen en el informe es que el respeto a la independencia del CNE debe ser garantizado y que los partidos políticos y candidatos deben implementar acciones que reduzcan la violencia política, dejar de lado la confrontación y llamar a los ciudadanos a ejercer el sufragio. Es necesario realizar una creciente demanda y presión social sobre organismos como la Unidad de Política Limpia (UPL) y el Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP).

Se debe detener el proceso de “institucionalización” gradual, desde el Estado, de las prácticas clientelares del partido de gobierno y en el ámbito de la justicia electoral, es crucial que se garantice el respecto a la institucionalidad.

“La REDH hace un llamado a detener discursos que inciten al odio y la violencia, el país está pasando por graves crisis económicas producto de la pandemia COVID-19 y los efectos de las tormentas tropicales de hace un año”, se expuso en el informe.

Problemáticas 

Algunas problemáticas abordadas es que la nueva Ley Electoral se terminó de aprobar dos días antes de la convocatoria a elecciones generales, obviando temas como la segunda vuelta electoral y la ciudadanización de las mesas electorales. Asimismo, no se aprobó a tiempo el presupuesto del CNE y del Registro Nacional de las Personas (RNP).

“La intromisión política llegó al punto de obstaculizar procesos administrativos referente a las transferencias y desembolsos del órgano electoral e incluso se intentó aprobar un decreto que buscaba limitar la libertad de expresión de las consejeras, que finalmente no se aprobó”, detalla.

Algunos elementos que podrían pasar factura son la ausencia de una Ley que administre la justicia electoral y si el Congreso Nacional permitirá que se vote con dos tarjetas de identificación, lo que dejaría un mal precedente en la transparencia del proceso.

La REDH también resalta el incumplimiento del cronograma electoral, la falta de planificación del presupuesto del CNE y los efectos que esto tendrá en la economía hondureña. Asimismo, es necesaria una eficiente fiscalización y trasparencia en el uso de los recursos públicos por parte de los partidos políticos, tanto en el financiamiento público como privado.

En lo que concierne a la eficiencia del gasto público en las elecciones generales, según la Cuenta del Milenio, Honduras es deficiente en indicadores como Estado de Derecho y Control de la Corrupción. El informe Latinobarómetro 2021 califica a Honduras como “una democracia que no logra despegar”, y que, a pesar de ello, invierte importantes recursos en la ejecución del proceso electoral (alrededor de 2,500 millones de lempiras para el 2021), lo que ha causado que la población no tenga confianza en dicho sistema.

Violencia política

Respecto a la violencia política, que afecta principalmente a hombres en un 76.6%, esta amenaza el desarrollo normal del proceso electoral, y es que, del 23 de diciembre de 2020 al 25 de octubre de 2021, el fenómeno de la violencia ha ido en aumento, perjudicando principalmente a los partidos Nacional, Libre y Liberal.

Los homicidios son la forma de violencia más utilizada contra los actores políticos en Honduras. Desde el llamado a elecciones primarias hasta el 25 de octubre se han reportado 27 homicidios, 18 coacciones, 11 atentados, 6 amenazas, un rapto y una coerción. De los casos registrados, 36 fueron cometidos con armas de fuego. Los departamentos con mayor incidencia de violencia política son Francisco Morazán, Cortés y Olancho, representando el 50.0% del total de los casos.

Las mujeres también sufren de violencia política ya sea con agresiones físicas, psicológicas e intimidación, lo que dificulta que tengan una participación efectiva al ser constantemente discriminadas y descalificadas. La violencia política también ha aquejado a la población LGTBI.

Clientelismo Político

En cuanto al clientelismo electoral y compra de votos, REDH manifestó: “En las últimas semanas se ha podido comprobar la tendencia creciente a incrementar el gasto de los dineros públicos en publicidad sesgada a favor de los candidatos oficialistas, en acciones de carácter político-clientelar, en la promoción de programas sociales de distribución de bienes de primera necesidad, en promesas de entrega de vivienda social”.

Gasto de campaña

En relación con el financiamiento político de las campañas electorales, el monitoreo del gasto se hizo vía redes sociales y medios tradicionales. Algunos hallazgos fueron: los candidatos hacen uso de la plataforma de Twitter aun cuando esta no permite realizar campañas publicitarias en temas políticos y mantiene una prohibición oficial de publicar anuncios políticos y de campañas de opinión, y que es un número reducido de candidatos y partidos políticos los que pagan publicidad en redes sociales.  

En algunos casos, no son los candidatos quienes hacen la publicidad directamente, sino miembros de su equipo o seguidores. Agregado a ello, un candidato puede tener múltiples cuentas con nombres diferentes y/o utilizar las cuentas del partido político para promocionarse, lo que vuelve más complicado conocer la inversión en publicidad a través de las redes sociales.

En consideración al monitoreo de medios, se realizó un análisis de resultados obtenidos a los 45 días de campaña política. En cuanto a gastos por presidente, el total general fue de L 20,911,254.50. El Partido Nacional fue el que más gastó con L 14,250,495.00; seguido por los partidos Liberal con L 5,789,674.50; Salvador de Honduras con L 612,430.00; Libertad y Refundación con L 202,765.00 y Nueva Ruta con L 55,890.00.

Perfiles y propuestas de candidatos

Otro tema de preocupación es que la población no conoce las propuestas, patrimonio, declaración de intereses y procesos judiciales de los candidatos a cargos de elección popular..

Según el informe, las y los candidatos a cargos de elección popular dan muy poco valor a que las y los votantes conozcan a fondo quiénes son y porqué aspiran a un cargo de elección popular.

“Persisten las campañas vacías, las y los candidatos rehuyen al debate y no se conocen las propuestas de la mayoría. Genera una fuerte preocupación ya que hasta ahora las y los aspirantes se resisten a dar a conocer a sus futuros votantes quiénes son y qué pretenden hacer una vez electos. De seguir esta tendencia, esta campaña puede ser una de las más opacas que ha registrado el país”, expresó Yovanny Argueta, Coordinador General de Sien Comunicaciones.

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